Prepara tu casa antes de marcharte de vacaciones

Ebrosa

Con el inicio de las vacaciones, más aún si estas son prolongadas y comprenden una larga estancia fuera de casa, la preocupación por la seguridad en el hogar se dispara. Más allá de dejar las llaves de la vivienda a un amigo de confianza o un vecino y pedirle que pase por el domicilio de cuando en cuando para comprobar que todo sigue en orden, hemos de prestar atención a una serie de elementos que no solo reforzarán la seguridad en el hogar frente a posibles robos sino también a accidentes domésticos y que, a su vez, propiciarán un ahorro considerable en lo relativo a suministros en las semanas en las que nuestro hogar permanezca vacío.

 

Apaga los electrodomésticos y evita cortocircuitos. No solo se trata de asegurarse de que ninguna luz quede encendida, sino también de cuidar que los electrodomésticos queden apagados y desenchufar regletas para eliminar la posibilidad de que se produzcan sobrecargas o cortocircuitos que pudieran generar pequeños incendios. Además, con ello reduciremos considerablemente el consumo energético de estos meses estivales, al eliminar un gasto innecesario, con su correspondiente ahorro. En este sentido, combiene precisar que los aparatos que quedan en "stand by", como a menudo ocurre con la televisión o el router, continúan consumiendo electricidad (entre el 5 y el 10% de toda la casa). En el caso concreto del frigorífico, se recomienda vaciarla, limpiarla y desconectarla. Sin embargo, no se aconseja desconectar el interruptor general porque en la mayoría de los casos eso implicaría el apagado del timbre, algo que podría alertar con vistas a un robo de que la vivienda está vacía.

 

En lo que respecta al agua, un grifo goteando olvidado puede suponer un considerable derroche, de ahí que haya que prestar especial atención para que estos permanezcan convenientemente bloqueados. Además, no está de más cerrar las llaves de paso, también para evitar posibles fugas.

 

Puertas y ventanas cerradas, persianas entreabiertas. Es muy importante asegurarse de que los puntos de acceso a la vivienda (puerta principal, balcones, patio, ventanas...) quedan totalemente cerrados pero sin dar cuenta de la ausencia del domicio. Por eso, no se debe retirar el felpudo de la entrada ni dejar rastros evidentes de que permancemos fuera de casa, como sería dejar todas las persianas completamente bajadas. En el caso de periodos de ausencia del hogar prolongados, se puede recurrir a temporizadores automáticos para, a través del encendido de algunas luces y electrodomésticos y la apertura de las persianas, emular que la vivienda no permanece vacía.

 

Invierte en seguridad. Toda apuesta por la seguridad redundará no solo en confort, sino también en nuestra tranquilidad, ya permanezcamos en el interior de nuestra vivienda o nos ausentemos de ella. Entre estas, incluimos contar con una puerta blindada o acorazada, algún sistema de alarma en el hogar, rejas en las ventanas en el caso de tratarse de un bajo o de las primeras plantas, cerramientos seguros en las ventanas...

 

 

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